Cómo Descubrí Qué Me Encantaba Viajar
Como podéis intuir, me llamo Javier. Aunque he nacido en Madrid, me he criado en un pueblo de Toledo llamado Madridejos, y cosa que por cierto agradezco. Aunque somos más o menos once mil habitantes (somos de los pueblos más grandes de la provincia), la vida es tranquila, pero precisamente no hay más libertad para un niño que un lugar en el cual tus padres no tengan que estar pendiente de ti todo el tiempo. Los recuerdos de mi infancia son muy agradables, fui (por lo menos como se dice en Madridejos) un bicho, fui bastante revoltoso, no paraba.
Perdonad que me haya remontado tanto tiempo atrás, pero es para que podáis entender cómo se ha ido gestando mi personalidad.
No sé cuantos años tenía aquí, lo único que sé, es que nunca estaba quieto
Cuando Madridejos se me quedó pequeño, me fui a Madrid a estudiar y hacer la mili, (otro punto positivo de Madridejos, es que estamos cerca de Toledo y Madrid, 65 y 120 km respectivamente, dos ciudades maravillosas). Aunque parece mentira, Madrid también se me empezó a quedar pequeña. Entonces decidí irme a vivir a Londres, cuando lo comuniqué a mi familia ya estaba todo dispuesto, me había buscado un trabajo y me había matriculado de mis estudios para no perder curso.
En este tiempo, yo viajé bastante por toda Europa, incluida Rusia, un país al que tengo mucho cariño, (en parte por las amistades que allí he creado). Yo ya por entonces tenía claro que lo de viajar me encantaba, y cuando conseguía tiempo y dinero, me iba fuera, pero viajando a la aventura, con la mochila y a lo que surgiera, normalmente solo. Viajando en estas condiciones, es cuando realmente conoces gente.
Pasados unos años el destino me llevó de nuevo a Madridejos, en este caso por trabajo. En Madridejos no es que haya mucho movimiento empresarial, pero hay dos o tres empresas con proyección internacional. Una de ellas es la empresa donde empecé a trabajar, Aceites García de la Cruz, una empresa que se dedica a la exportación de aceite de oliva. Está creciendo muy rápido, en Japón (hoy por hoy mercado más exigente), somos el primer envasador español, y en Estados Unidos, hemos abierto este año 2016 oficina en Nueva York.
Después de ocho años y un mes, (habían pasado muy rápidos en esta empresa que considero mi casa), sentí la necesidad de irme, (un saludo a todos mis compañeros, besos y abrazos, he dejado una familia allí).
fotografía del último día de trabajo, recibí unos regalos y nos fuimos a cenar todos juntos. No lo esperaba, fue una sorpresa.
Muchas Gracias Compañeros
Me dije a mi mismo que la vida es muy corta, tengo muchas cosas pendientes y hay que aprovecharla, «Carpe Díem”. A pesar de estar encantado, (imagínense, me costó un año dejar la empresa, me tuve que poner una fecha, si no, no lo consigo ), sabía que lo tenía que hacer, como la canción de “Father and Son” (I know I have to go). En un principio yo quería irme al sudeste asiático. Pero me dije, “ ¡ oye Javier !, tú tienes un sueño pendiente” , y me contesté, “es verdad», pues nada, ¡ A Por La Vuelta Al Mundo !
(para conocer la historia del pueblo de Madridejos a base de fotografías, vídeos e información, podéis visitar esta web, es muy completa, www.josemariamorenogarcia.es, José María, enhorabuena por tu labor)